El agua
es un bien precioso y escaso que debemos cuidar
y ahorrar atendiendo a criterios ecológicos, sociales y también
económicos.
La
buena
noticia es que este ahorro puede realizarse además sin
pérdida de confort y con una muy escasa inversión. Ahí
van unas ideas:
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El WC
es un necesario aparato al que en ocasiones damos un
uso inadecuado. No utilice la taza como papelera
ni
realice descargas innecesarias.
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Para
ahorrar agua en las descargas puede Vd. utilizar el
conocido método de introducir una botella llena
dentro de la cisterna. El inconveniente es que en
ocasiones necesitamos una descarga abundante para la
correcta evacuación de la taza y eso no será posible
si hemos limitado la capacidad de la cisterna.
Entonces nos veremos obligados a realizar varias
descargas desperdiciando más agua de la que
queríamos ahorrar.
La solución práctica existe. Actualmente
puede
encontrar mecanismos de doble descarga que
permiten elegir el volumen de agua a descargar
según el botón que se pulse y que son adaptables a la práctica
totalidad de los WC del mercado. Pregunte a su
fontanero.
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Utilice el agua necesaria y no deje el grifo abierto
cuando no lo necesite, por ejemplo mientras se está lavando
los dientes.
Además existen filtros atomizadores
adaptables a la mayoría de griferías especialmente
concebidos para reducir el caudal de agua de su
grifería.
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Cuando
deba cambiar su grifería tenga presente que
existen
modelos preparados para utilizar el caudal al
completo o solo la mitad, dependiendo de su
necesidad en cada momento. Existen también modelos
de mono-mando especialmente concebidos para que a su
apertura no se inicie la circulación de agua
caliente de forma automática. Con esta grifería
además de agua ahorrará Vd. en la energía necesaria
para calentarla.
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